Redacción / Guanajuato, Gto.
Que la siembra de agave en el estado no sea en perjuicio al medio ambiente y sin riesgos para la salud de los habitantes de la región con mayor superficie dedicada a ese cultivo, es el propósito de una iniciativa del diputado priista Adolfo Alfaro.
Se trata de una propuesta legal que impactaría en el Código Territorial para el Estado y los Municipios de Guanajuato para evitar que sean deforestadas zonas donde se cultiva la planta para producir tequila.
En su exposición de motivos, el legislador del Grupo Parlamentario del PRI reconoció que la siembra de agave genera, de manera inevitable, deforestación, y se refirió a afectaciones que ha reconocido la propia Secretaría del Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial (SMAOT).
Concretamente a la Sierra de Pénjamo y Cerro del Palenque, así como al Cerro de la Paz, también en Pénjamo, y al Cerro de Huanímaro, las cuales no deberían ser destinadas a la producción de agave porque son áreas fundamentales para la recarga de los acuíferos.
“Las autoridades reguladoras no están supervisando la siembra de agave, por lo que existe un sin número de casos en que se hace de forma irregular, es decir, sin contar con el permiso de uso de suelo o, en su caso, con la modificación respectiva otorgada, previa valoración, por la autoridad competente”, añadió Alfaro Reyes.
Dijo que se estima que la deforestación generada por la siembra de agave, del 2014 al 2022, es de 3 mil 152 hectáreas, lo que representa una pérdida anual de 394 hectáreas que pertenecen a ecosistemas forestales, “lo que constituye un problema de urgente solución antes de que el daño ecológico y ambiental sea irreversible”.
Reconoció la mejora económica que deja la siembra de agave, pero remarcó que los riesgos pueden prevenirse.
Su iniciativa contempla que en el Código Territorial se garantice “el cuidado de los bosques, los ecosistemas, las áreas protegidas de alto valor de conservación, y que se supervise, a través de los Mapas de Compatibilidad u hojas de ruta, que “cualquier área de cultivo esté libre de deforestación para garantizar el cuidado de los bosques, ecosistemas estratégicos y áreas de alto valor de conservación”.
Dijo que dicho mapa podrá ser útil, además, para apreciar zonas con siembra de agave en forma irregular, o en forma desordenada, sin autorización, para proyectar su crecimiento sin deforestación, y constituirá la hoja de ruta que dará certeza a la autoridad y a la sociedad de que el medio ambiente no está sufriendo daños por esta actividad.
Alfaro Reyes expuso que en el estado se siembran 43 mil hectáreas de agave en siete municipios con Denominación de Origen para su producción: Abasolo, Cuerámaro, Huanímaro, Purísima del Rincón, Manuel Doblado, Pénjamo y Romita, los tres últimos, con las mayores superficies dedicadas a ese cultivo.
El estado de Guanajuato aporta la producción del 13.62 % del agave a nivel nacional y constituye el 20% del valor de la producción nacional, abundó el legislador, quien apuntó que además de la afectación que pueda ocasionar ese cultivo si no se toman medidas preventivas, también debe considerarse la contaminación que genera la industrialización de la producción del tequila.