Redacción / Ciudad de México
México y Estados Unidos abrieron este viernes una nueva etapa de su cooperación en seguridad, tras la fracasada ofensiva militar antidrogas desplegada hace 13 años, durante una visita del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, a la Ciudad de México.
Así, los gobiernos de México y EE.UU. dieron por finalizada la Iniciativa Mérida para dar inicio a una nueva fase en la relación bilateral que medirá su éxito en la reducción de la violencia y no en la captura de capos del narcotráfico, según apuntó el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard.
“Dejamos atrás la iniciativa Mérida y entramos al Entendimiento Bicentenario”, dijo Ebrard en conferencia de prensa junto al secretario de Estado de EE.UU, Antony Blinken, tras concluir el primer Diálogo de Alto Nivel de Seguridad (DANS).
Ebrard explicó que la Iniciativa Mérida —como se le conoce al acuerdo firmado en 2007 por los entonces mandatarios George W. Bush y Felipe Calderón— estaba centrada en la asistencia financiera que otorgaba Washington a México para la compra de helicópteros, armamento y equipo.
“La Iniciativa Mérida, desde el punto de vista de México, estaba centrada en la tesis de que había que capturar a los capos de los carteles y con eso era suficiente”, explicó Ebrard.
“Hoy en día, lo que hay es una estrategia común que es más compleja. Ya vimos que no va a ser suficiente si solo capturamos a unos capos”, agregó el canciller. La nueva estrategia, según explicó Ebrard, estará marcada por las acciones que implementen para frenar el aumento de las adicciones, así como en ofrecer oportunidades de trabajo a los jóvenes para evitar que sean reclutados por organizaciones delincuenciales.
“México y Estados Unidos afirmamos nuestro compromiso con los derechos humanos y con el avance de la equidad, los derechos civiles, la justicia racial y la igualdad de oportunidades en cada una de nuestras naciones. En este sentido, ambos países incrementarán sus esfuerzos de cooperación forense para ayudar a resolver los miles de casos de desapariciones en México, en beneficio de las familias de las víctimas y en contra de la impunidad.”
Durante su intervención, Blinken apuntó que, en el pasado, las dos naciones se apoyaron demasiado en las “fuerzas de seguridad”. En contraste, esta nueva etapa promoverá la inversión y las “oportunidades económicas”, con especial atención en las regiones más vulnerables.
Por otra parte, Blinken destacó que el Entendimiento Bicentenario estará guiado por la “responsabilidad compartida” entre las dos naciones.
Tráfico de armas
Las delegaciones acordaron combatir el tráfico de armas, una prioridad para la administración de López Obrador. “Para nosotros, reducir el número de armas en México significa reducir la violencia”, apuntó Ebrard.
En ese sentido, Blinken reconoció que “muchas de estas armas” que son utilizadas en México “provienen de EE.UU.”.
“Estamos comprometidos en profundizar nuestra colaboración sobre el rastreo de las armas, las investigaciones y los juicios para interrumpir su suministro”, afirmó el secretario de Estado norteamericano.
Trata de personas
Otro de los pilares es reducir la trata de personas, mediante el combate a las organizaciones transnacionales que operan en la región, incluyendo aquellas que se dedican al tráfico de migrantes.
De acuerdo con Blinken, la prioridad de las administraciones de Biden y López Obrador continuará siendo “atacar las causas de la migración”.
Fracaso
Dentro de la Iniciativa Mérida, Washington desembolsó 3 mil 300 millones de dólares en asistencia militar y asesorías. Pero, para el gobierno de México fue un fracaso porque no sirvió para desmantelar a las organizaciones criminales y en cambio disparó la violencia. “Nos centraremos más intensamente que antes en la raíz y el núcleo de las fuerzas que nos amenazan, abordando las razones subyacentes por las que continúan existiendo y creciendo”, aseveró el secretario estadounidense de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas. El nuevo enfoque recalca, no obstante, que se mantendrá la persecución a los criminales.
Más temprano, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo una reunión en el palacio presidencial con Blinken, el secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, y el secretario de Justicia de ese país, Merrick Garland. AMLO manifestó la disposición de su gobierno a cooperar y trabajar con Washington en un marco de respeto mutuo de las soberanías y reiteró la invitación a su homólogo Joe Biden para visitar México.
¿De qué va?
Reducir adicción y daños asociados
Con la finalidad de prevenir el consumo de drogas, Estados Unidos se compromete a identificar, tratar y apoyar a las personas afectadas por los opioides para brindarles asistencia financiera y técnica a los gobiernos locales y estatales a través de nuevas subvenciones del Programa Integral de Abuso de Opioides, Estimulantes y otras Sustancias (COSSAP). Asimismo, proporcionará recursos de la Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias para apoyar su tratamiento.
Crear red para prevenir homicidios
Dicha red será una plataforma para el intercambio de mejores prácticas en la prevención del crimen y la violencia, además de que trabajará con jóvenes en riesgo. Para ello, se hará un equipo multidisciplinario de fuerza de tarea sobre homicidios para la atención de delitos de alto impacto vinculados a organizaciones criminales transnacionales.
Programa de control de contenedores portuarios
Con esto se busca prevenir los delitos transfronterizos. Para ello, México y la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) tienen la intención de firmar el documento con el que se busca fortalecer el control y gestión de los envíos entrantes de precursores químicos.
Grupo binacional sobre regulación de precursores químicos
Con la finalidad de estandarizar protocolos y la regulación de sustancias de doble uso para prevenir su utilización en la producción de drogas sintéticas.
(Con información de AP, AFP, EFE, Reuters, RT, SRE).