Redacción / Rayán, Qatar
Con Luka Modric dejándolo todo y un Dominik Livakovic transformado en el arquero sensación del Mundial, una indomable Croacia acabó con el sueño de Brasil de lograr el hexacampeonato al superar a la Canarinha por 4-2 en la tanda de penaltis tras acabar el encuentro con empate a cero y la prórroga con igualada a uno para pasar a las semifinales de la Copa del Mundo de Qatar 2022.
Fue un partido escabroso para los sudamericanos, que parecieron encontrar la luz en el minuto 15 de la prórroga, cuando Neymar armó un par de paredes con sus compañeros y logró filtrarse hasta el área que protegía Dominik Livakovic y marcar el primer gol del partido.
De ese modo Neymar logró igualar la marca del legendario Pelé de número de goles marcados en los Mundiales para Brasil: 10 para cada uno.
Pero Croacia tiene un método aprendido de memoria en las grandes citas del futbol: perseverar hasta el último instante.
Una vez más, la selección de una nación cuya población apenas roza los 4 millones de personas, se levantó de la lona cuando parecía noqueada. No se rindieron y en un contragolpe lograron igualar en el minuto 27 del tiempo extra a través de Bruno Petkovic. La locura.
“Es uno de los más grandes triunfos de (nuestra) historia, se hizo un gran partido tácticamente y el equipo fue inteligente para remontar”, dijo el entrenador de los croatas Zlatko Dalić. “Demostramos que sabemos luchar. Es un gran éxito luego de cuatro años volver a las semifinales”.
En el primer tiempo ambas selecciones desplegaron un juego muy igualado, aunque ninguno de los cuadros logró abrir el marcador. No obstante, el episodio más relevante ocurrió en el minuto 25, cuando el defensa brasileño Danilo no logró frenar a Josip Juranovic en la banda y le propinó una patada en la cabeza. El árbitro inglés Michael Oliver le mostró la tarjeta amarilla, pese a que los croatas exigían su expulsión directa.
Durante la segunda mitad el equipo de ‘Tite’ generó más peligro, con un total de 15 remates. Sin embargo, el combinado bálcanico supo defenderse con uñas y dientes, manteniendo su portería a cero hasta la prórroga.
El arquero croata Dominik Livakovic, que se fue la estrella en la tanda de penaltis contra Japón, volvió a lucirse con 8 paradas a lo largo del partido.
Para la pentacampeona Brasil, todo se puede resumir con unos 15 minutos finales en los que transitaron de una delirante apoteosis a una profunda frustración.
“Estaba en nuestras manos, se nos escapó”, se lamentó el centrocampista brasileño Casemiro, quien perdió el balón ante el asedio de Modric para un contragolpe que acabó en la anotación de Petkovic, un zurdazo que se desvió en Marquinhos.
Croacia se las verá ahora contra Argentina que derrotó, también en penaltis, a Holanda al intentar repetir en la final de la Copa del Mundo cuatro años después de sucumbir ante Francia en la puja por el título.
Luego que el brillante gol de Neymar — tras una serie de paredes y regates — adelantó a Brasil a los 105 minutos, Petkovic empató para Croacia a los 117 y mandó el partido a los penales.
Desde los 11 metros, el portero Dominik Livakovic tapó de entrada el tiro de Rodrygo y Marquinhos falló en la cuarta ejecución. Livakovic, quien juega en la liga doméstica con el Dínamo de Zagreb, venía de tapar lanzamientos en la serie de penales contra Japón en octavos.
Nikola Vlasic, Lovro Majer, Modric y Mislav Orsic convirtieron en ese orden para Croacia, que están repitiendo la fórmula que les funcionó en Rusia donde, al igual que en Qatar, ganaron llegaron a semifinales al ganar desde los penales. Hace cuatro años, por esa vía, dejaron en el camino a Dinamarca y al anfitrión Rusia. Han salido airosos en las cuatro tandas desde los 11 metros que han disputado en su joven historia mundialista, remontándose al debut en Francia 1998.
Sólo Casemiro y Pedro acertaron sus penales por Brasil, uno de los grandes candidatos al título, que perdió su primera serie de penales desde México 1986, cuando cayó ante Francia, también en cuartos de final.
“Debemos estar listos para compartir la alegría cuando se gana, pero también la tristeza cuando se pierde”, dijo el entrenador ‘Tite’. “Ahora tenemos una nueva generación de jugadores que encontrará fuerza en la adversidad. Entiendo que soy el máximo responsable, pero no hay héroes en el triunfo ni villanos en la derrota, eso no existe”.
‘Tite’ añadió que la derrota marca el final de su ciclo porque es algo que ya había anunciado y “mantendré mi palabra”.
Brasil volvió a estrellarse ante un oponente europeo en una fase definitoria de un Mundial. No ganan desde que vencieron a Alemania en la final de Corea y Japón 2002 para atrapar su quinto título.
‘Tite’ dijo que no se arrepentía de los cinco cambios que hizo, dos de esos en el alargue cuando sacó a Lucas Paquetá y Eder Militao y los reemplazó con Alex Sandro y Fred.
Aunque son los mayores ganadores en la historia de los Mundiales (con cinco campeonatos), Brasil no gana una Copa del Mundo desde el torneo de Corea-Japón 2022.
En redes sociales, el presidente electo de Brasil, Lula da Silva, lamentó la derrota de la selección brasileña, pero también destacó el desempeño de Neymar y compañía: “Brasil hizo un esfuerzo, Neymar marcó un gol hermoso y el equipo mereció más. Mis felicitaciones a los jugadores y al cuerpo técnico. Sigamos adelante porque en la vida nunca podemos rendirnos”.
(Con información de AFP, AP, EFE)