Redacción / Ciudad de México
La Máquina no afinó bien el motor y la noche del miércoles salió algo dañada, ya que no dio su mejor noche y terminó empatado 0-0 con Monterrey, por lo que dejan todo para el partido de vuelta.
Pese al empuje de su afición, la Máquina, que llegó al partido de ida, luego de eliminar al León en el repechaje y que ganó cinco partidos consecutivos, no supo aprovechar su localía.
Ambos equipos generaron pocas oportunidades de peligro en el área rival, y las escasas apariciones dentro del área fueron mal ejecutadas por los delanteros. Para Cruz Azul la más clara fue al minuto 76 en el cobro de un tiro libre que Ignacio Rivero estrelló en el travesaño.
En tanto, para Rayados, minutos después de la jugada de Rivero, Rogelio Funes Mori, quien reapareció, mandó un centro por el costado izquierdo y en el área apareció Rodolfo Pizarro que intentó bajar el balón, pero su recepción fue errónea y el balón se fue por un costado de la portería defendida por Jesús Corona.
Todavía en los instantes finales, el atacante cruzazulino Cristian Tabó remató un centro a primer poste, pero no logró darle dirección de portería al esférico que se fue a un lado del marco regiomontano.
Para seguir con vida y poder llegar a la semifinal, los Celestes del Cruz Azul requieren cualquier victoria en el estadio BBVA de Monterrey.
En los cuartos de final el primer criterio para desempatar una serie es la posición en la campaña regular y los Celestes fueron séptimos, mientras que Monterrey concluyó en la segunda posición.
Mientras que a los Rayados, que descansaron la semana pasada, les basta cualquier empate para meterse a la semifinal.
(Con información de AP)