Redacción / Berlín, Alemania
Miles de policías intervinieron en redadas el miércoles en buena parte de Alemania contra supuestos extremistas de ultraderecha que al parecer querían derrocar al gobierno en un golpe de Estado armado. Veinticinco personas fueron detenidas, según las autoridades.
Los detenidos, integrantes del grupo “Reichsbürger” (Ciudadanos del Reich), son sospechosos de “haber hecho preparativos concretos para entrar violentamente en el Bundestag, la cámara baja del Parlamento, con un pequeño grupo armado”, informó un comunicado de la Fiscalía.
Los sospechosos pertenecen a una organización terrorista fundada, a más tardar, a finales de noviembre del año pasado, “que se ha fijado el objetivo de acabar con el orden estatal establecido en Alemania y sustituirlo por su propia forma de Estado, cuyas grandes líneas ya han sido elaboradas”.
“Los miembros de la organización son conscientes de que este plan sólo puede realizarse mediante el uso de medios militares y la violencia contra representantes del Estado”, lo que incluye muertes, que aceptan como “paso intermedio para lograr el ‘cambio del sistema a todos los niveles’”, agrega el comunicado.
A los acusados les une “un profundo rechazo a las instituciones del Estado y al orden liberal democrático” de la República Federal de Alemania, que con el tiempo les ha llevado a tomar la decisión de “participar en su eliminación violenta” y a comenzar para ello con preparativos concretos.
El ministro de Justicia, Marco Buschmann, describió los registros como una “operación antiterrorista” y añadió que los sospechosos podrían haber planeado un ataque armado a instituciones del estado.
Los miembros de la agrupación siguen un conglomerado de mitos conspirativos consistente tanto en narraciones de la ideología de los Reichsbürger -movimiento ultraderechista que no reconoce la soberanía de la actual Alemania- y QAnon.
Supuestamente creían en un “conglomerado de teorías conspirativas consistentes en mensajes de los llamados Ciudadanos del Reich, así como ideología QAnon”, según el comunicado de la fiscalía. También creían que Alemania estaba gobernada por un “Estado profundo”, una creencia similar a las afirmaciones sin base expresadas por el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump sobre su país.
El órgano central de la agrupación es un “consejo” y cuenta además con un “brazo militar”, al que corresponde la toma planeada del poder por la fuerza de las armas.
Algunos miembros habían hecho “preparativos concretos” para asaltar el parlamento federal alemán con un pequeño grupo armado, según la fiscalía. “Los detalles (de este plan) aún tienen que investigarse” para determinar si alguno de los sospechosos puede ser acusado de traición, señalaron.
Según la Fiscalía, algunos de los miembros de la organización desempañaron en el pasado un servicio activo en el Ejército alemán.
Los 22 presuntos miembros de la organización, de los cuales dos actuaban como cabecillas, son ciudadanos alemanes, al igual que dos de los tres simpatizantes detenidos, mientras que el tercero es una ciudadana rusa.
Las detenciones se produjeron en los estados federados de Baden-Württemberg, Baviera, Berlín, Hesse, Baja Sajonia, Sajonia y Turingia, así como un caso en Kitzbühel (Austria) y otro en Perugia (Italia).
Las redadas, en las que participan más de 3.000 agentes, todavía continúan y se están llevando a cabo además en los estados de Brandeburgo, Renania del Norte-Westfalia, Renania-Palatinado y Sarre. El operativo se dirige asimismo contra otros 27 acusados.
Nobles, exmilitares y políticos
Según el semanario Der Spiegel, entre los lugares registrados estaban los barracones de la unidad alemana de las fuerzas especiales KSK en la localidad suroccidental de Calw. La unidad ha sido investigada en el pasado por la supuesta pertenencia de algunos soldados a grupos de ultraderecha.
Los supuestos líderes del grupo fueron identificados sólo como Heinrich XIII P. R. y Rüdiger v. P., de acuerdo a las leyes alemanas de privacidad. Der Spiegel indicó que este último es un hombre conocido de 71 años, miembro de la nobleza menor alemana, mientras que el anterior es un exparacaidista de 69 años.
Heinrich XIII P. R., al que el grupo pensaba convertir en nuevo líder de Alemania, había contactado con funcionarios rusos para negociar un nuevo orden en el país una vez fuera derrocado el actual gobierno alemán, según la fiscalía. Supuestamente contó con la asistencia de una mujer rusa, Vitalia B.
“Según nuestras investigaciones actuales, sin embargo, no hay indicio de que las personas contactadas respondieran de forma positiva a su petición”, señalaron los fiscales.
Otra persona detenida el miércoles fue identificada como Birgit M.-W. Der Spiegel indicó que la mujer es juez y exlegisladora del partido de ultraderecha Alternativa por Alemania.
El partido, conocido por sus siglas en alemán AfD, se ha visto bajo un creciente escrutinio de las fuerzas de seguridad alemana debido a sus lazos con extremistas.
Los colíderes de AfD, Tino Chrupalla y Alice Weidel, condenaron los supuestos planes del grupo, que según dijeron habían conocido por la prensa.
“Tenemos plena confianza en las autoridades implicadas y pedimos una investigación rápida y en profundidad”, indicaron en un comunicado.
Sara Nanni, legisladora del Partido Verde, sugirió que el grupo podría no haber sido muy capaz.
“Siguen apareciendo más detalles que plantean dudas sobre que estas personas fueran siquiera lo bastante inteligentes para planear y ejecutar un golpe de esta clase”, indicó Nanni en una publicación en la red social Mastodon. “El hecho es, no importa lo toscas de sus ideas ni lo abocados al fracaso que estén sus planes, ¡incluso el intento es peligroso!”.
Las autoridades han advertido en varias ocasiones que los extremistas de ultraderecha suponen la mayor amenaza para la seguridad nacional alemana. Ese riesgo se hizo patente tras el asesinato de un político regional y el ataque mortal a una sinagoga en 2019. Al año siguiente, extremistas de ultraderecha que participaban en una protesta contra las restricciones contra la pandemia en el país intentaron sin éxito asaltar el edificio del Bundestag en Berlín.
(Con información de AFP, AP, DPA)