Benjamín Segoviano
El XXI Campeonato del Mundo de Futbol fue concedido a Rusia en 2010, misma fecha donde se otorgó el torneo de 2022 a Qatar. Una investigación posterior arrojó la sospecha de que hubo sobornos para beneficiar a ambas candidaturas, lo que causaría una verdadera revolución al interior de la FIFA, luego de la cual serían destituidos varios altos funcionarios del organismo, incluido el presidente, Joseph Blatter, al que sustituiría Gianni Infantino.
Para la competencia, los rusos destinaron una inversión de 14 mil millones de dólares, por lo que el Mundial de 2014 ha sido el más costoso de la historia. Se llevó a cabo en 12 estadios de 11 ciudades, incluida una en territorio asiático: Ekaterinburgo.
Asimismo, se usó por primera vez el Árbitro Asistente de Video (VAR) y un balón (Telstar 18) con chip incorporado para seguir los partidos en vivo. La mascota fue un lobo llamado Zabivaka.
A las fases de clasificación se inscribieron un total de 208 países. Como resultado, quedaron eliminadas selecciones históricas, entre ellas las de Italia, Países Bajos, Chile y Estados Unidos. Por otra parte, volvió Perú después de una larga ausencia y además debutó Islandia, que había hecho un gran papel en la Eurocopa de 2016.
En la Concacaf, hubo tres rondas a eliminación directa, una fase de grupos y un hexagonal final, para definir tres boletos y la mitad de otro, que buscaría su pase en repechaje contra un representante de Asia. México y los otros cinco equipos con mejor posición en el ranking FIFA avanzaron directamente a la cuarta etapa, donde el Tri fue integrado al Grupo A, junto a Honduras, Canadá y el Salvador.
A la sazón, el director técnico de México era el colombiano Juan Carlos Osorio, elegido en 2015 para relevar a Miguel Herrera, quien fue cesado por agredir a un periodista, aunque el nombramiento desató una avalancha de críticas por parte de periodistas, aficionados y otros técnicos. Sin embargo, el timonel fue sostenido incluso después de que el cuadro tricolor fue goleado 7-0 por Chile en la Copa América Centenario de 2016.
El cuadro mexicano cedió solo un punto al iniciar sus andanzas rumbo a Rusia, tras empatar en casa sin goles contra Honduras en el último juego de la fase de grupos, pues el resto de los partidos los ganó con cierta comodidad: 3-0 y 3-1 a El Salvador, 2-0 a Honduras en San Pedro Sula, y 3-0 y 2-0 a Canadá en Vancouver y en la capital azteca, respectivamente.
El hexagonal decisivo tampoco representó un fuerte obstáculo. México terminó a la cabeza con seis victorias, incluida una por 2-1 en Columbus, con la que se rompió el dominio que tenía el cuadro estadounidense en este tipo de encuentros desde 1998. El juego de vuelta, en el Azteca, culminó 1-1. Con Panamá se empató a cero de visita y se obtuvo un triunfo de 1-0 en casa. A Costa Rica se le venció 2-0 y se igualó sin goles en San José. A Trinidad y Tobago se le ganó 1-0 en Puerto España y 3-1 como local, y a Honduras se le goleó en casa 3-0, pero se perdió el último encuentro por 3-2 en San Pedro Sula.
Atrás de México avanzaron Costa Rica y Panamá, en tanto que los catrachos debieron disputar el pase contra Australia, que ganaron los canguros tras igualar sin goles en San Pedro Sula y ganar 3-0 en Sídney. Por su lado, Estados Unidos quedó eliminado en la última fecha, vencido 2-1 por los trinitarios en tierras caribeñas.
Revancha ante la Mannschaft
En el Mundial, México integró el Grupo F, junto con el campeón Alemania, Suecia y Corea del Sur. El debut fue nada menos que contra los germanos, en el Estadio Olímpico Luzhnikí de Moscú, donde saltaron a la cancha Guillermo Ochoa; Hugo Ayala, Carlos Salcedo, Héctor Moreno y Miguel Layún; Carlos Vela, Héctor Herrera y Andrés Guardado; Hirving Lozano, Javier Hernández y Jesús Gallardo. Posteriormente, ingresarían Rafael Márquez, Edson Álvarez y Raúl Jiménez. Por su lado, Joachim Löw envió a Manuel Neuer; Marvin Plattenhardt, Mats Hummels, Sami Khedira y Julian Draxler; Toni Kroos, Timo Werner y Mesut Özil; Thomas Müller, Jerome Boateng y Joshua Kimmich. Entrarían de cambio Mario Gómez, Marco Reus y William Brandt.
El juego fue espectacular, un vaivén de ida y vuelta en el que los germanos controlaban la pelota, pero México lanzaba peligrosísimos contragolpes, de los cuales uno, encabezado por Chicharito Hernández a los 35’, dio resultado con un pase a Lozano, el cual fintó a Özil dentro del área y fusiló a Neuer para el 1-0. Viéndose abajo en el marcador, los teutones adelantaron líneas buscando afanosamente el empate, pero exponiéndose a los veloces contraataques aztecas, que no fructificaron por falta de puntería. Así finalizó el encuentro, en medio de una atronadora ovación que celebraba el triunfo azteca.
Un detalle destacado es que, al entrar de cambio, Rafael Márquez se unió al club de futbolistas con cinco mundiales jugados, donde también se encuentran Antonio Carbajal, Lothar Matthäus y Gianluigi Buffon y al que pueden sumarse en Qatar 2022 Andrés Guardado, Lionel Messi y Cristiano Ronaldo. Guillermo Ochoa también llegaría a cinco, pero en su caso solo habría participado en tres, pues en 2006 y 2010 fue suplente.
La victoria ante los campeones alimentó las esperanzas de que por fin el tricolor avanzara más allá de octavos de final. Los críticos de Osorio callaron, por lo que se esperó con optimismo el segundo duelo, ante Corea del Sur, a la que México enfrentaba por segunda ocasión, luego del lejano triunfo de 20 años atrás, por 3-1. Para este partido, celebrado en la Rostov Arena de Rostov del Don, solo entró Edson Álvarez Ayala en la central, aunque posteriormente ingresaron Rafael Márquez, Giovani dos Santos y Jesús Manuel Tecatito Corona. Por su lado, Shin Tae-yong alineó a Cho Hyun-woo; Lee Yong, Jang Hyun-soo, Kim Young-gwon y Kim Min-woo (Hong Chul); Moon Seon-min (Jung Woo-young), Ju Se-jong (Lee Seung-woo) y Ki Sung-yueng; Hwang Hee-chan, Lee Jae-sung y Son Heung-min.
Nuevamente, como en 1998, el cuadro azteca se mostró superior al conjunto asiático, veloz pero poco eficaz. A los 24, un defensa coreano interceptó un balón con la mano en el área, por lo que el árbitro marcó penal, que fue bien ejecutado por Vela. Y a los 65’, un contragolpe magistral entre Lozano y Hernández fue terminado por éste con quiebre a un defensa y gol, casi una calca del anotado contra Alemania y con los mismos protagonistas, solo que en Moscú quien dio el pase fue Chicharito y quien concretó fue Chucky. Sobre el final, el capitán Ki Sung-yueng descontó con un trallazo de media distancia.
Con seis puntos, se había dado un gran paso para calificar, pero no se tenía el pase asegurado, debido a la combinación de resultados. Los suecos sumaban tres unidades, producto de su victoria inicial de 1-0 ante los coreanos, mientras que Alemania contaba las mismas cifras gracias a su triunfo de 2-1 sobre los escandinavos. Si el Tri caía frente a Suecia y los teutones vencían a los asiáticos, todo dependería de la diferencia de goles. Incluso Corea podía ganar un boleto, si lograba vencer a los germanos y México ganaba.
Para el tercer duelo, el conjunto tricolor tuvo que volar más allá de los Montes Urales, hasta Ekaterimburgo, donde saltó al pasto el mismo once que inició el juego anterior. Marco Fabián, Corona y Peralta ingresarían de cambio. A su vez, Janne Andersson envió a Robin Olsen; Mikael Lustig, Victor Lindelöf, Andreas Granqvist, Ludwig Augustinsson y Viktor Claesson; Sebastian Larsson (Gustav Svensson) y Albin Ekdal (Oscar Hiljemark); Emil Forsberg, Marcus Berg (Isaac Kiese Thelin) y Ola Toivonen.
Todo lo bueno que había mostrado el conjunto azteca en sus duelos anteriores lo perdió en este choque. Los europeos aprovecharon su mayor presencia física y el juego aéreo para echar atrás a los mexicanos, que se vieron nerviosos e imprecisos. De esa manera, Augustinsson abrió el marcador con un zurdazo imparable; a los 62’, un discutido pénalti que anotó Granqvist puso el 2-0 y poco después un desvió de Edson Álvarez se convirtió en el 3-0 con que concluirían las acciones.
Pero la atención para entonces ya no estaba en este encuentro, sino en Kazán, donde la Mannschaft buscaba vencer a Corea para arrebatar el boleto al Tri. Mas todas las embestidas germanas fallaron, se estrellaron en la defensa asiática o fueron detenidas por el arquero Hyun-woo. En cambio, sobre el tiempo, Y. G. Kim anotó el 1-0. Desesperados, los teutones se fueron con todo al ataque, de tal forma que a los 96’ incluso el portero Neuer subió a jugar un balón a tres cuartos de cancha, el cual le fue arrebatado por un rival, que lanzó un largo pase a H. M. Son, quien, ante el arco desguarnecido, solo tuvo que tocar el balón para empujar el 2-0 y salvar de paso a México del desastre.
La eliminación de Alemania sorprendió al mundo. Por tercera vez consecutiva, el campeón quedaba fuera en la fase de grupos, pues lo mismo le había ocurrido a Italia en 2010 y a España en 2014. Los jugadores teutones fueron recibidos con abucheos y la prensa utilizó calificativos como “catástrofe”, “desgracia histórica”, “final bochornoso”, “pesadilla”.
Clasificado de manera providencial, gracias al equipo coreano, México respiró aliviado y se alistó para su encuentro de octavos de final, ahora contra Brasil, con la única modificación de Ayala por Layún, aunque este ingresaría después por Márquez, como lo harían también Dos Santos por Álvarez y Raúl Jiménez por Chicharito. Tite, técnico del scratch, alineó a Allison; Fagner, Thiago Silva, Miranda, Filipe Luis y Casemiro; Paulinho (Fernandinho), Willian (Marquinhos) y Coutinho (Firmino); Neymar y Gabriel Jesús.
El partido se efectuó en la Samara Arena de Samara y mostró a un cuadro azteca que respetó demasiado la camiseta del rival, aunque intentó generar peligro ante el arco de Allison. Los amazónicos, en base a velocidad, ganaron 2-0, con tantos de Neymar y Firmino. Por séptima ocasión consecutiva, México no lograba pasar de octavos de final.
Islandia empata con Argentina
El Grupo A fue ganado por Uruguay con nueve puntos, tras sendas victorias de 1-0 ante Arabia Saudita y Egipto y un contundente 3-0 sobre el local Rusia. El cuadro de casa obtuvo el otro boleto al debutar con un 5-0 frente a los saudíes e imponerse 3-1 a los egipcios, quienes también fueron vencidos 3-2 por los árabes.
En el Grupo B avanzaron los dos países ibéricos, España y Portugal, ambos con cinco puntos luego de que empataran entre ellos 3-3, en un trepidante partido donde Cristiano Ronaldo hizo los tres goles lusitanos, y de que los hispanos derrotaran 1-0 a Irán e igualaran 2-2 con Marruecos, mientras los portugueses vencían a los marroquíes 1-0 y dividían puntos con los iraníes (1-1), que a su vez se impusieron por la mínima a los “leones del Atlas”.
Francia encabezó el Grupo C, en el que solo cedió un punto ante Dinamarca (0-0) y luego derrotó a Australia (2-1) y Perú (1-0). Los daneses lograron el otro pase con un triunfo mínimo (1-0) ante los incas y un empate a un gol con los canguros, que en el último choque del bloque cayeron por 2-0 frente a los sudamericanos.
Croacia ganó con autoridad el Grupo D, con tres triunfos: primero se impuso 2-0 a Nigeria; enseguida logró una soberbia goleada de 3-0 sobre Argentina y finalmente derrotó 2-1 al debutante Islandia. Los pamperos no habían podido superar en su juego inicial a los entusiastas islandeses, con los que empataron a un gol, por lo que lograron su boleto hasta su último duelo, en el que vencieron 2-1 a Nigeria, cuadro que había albergado esperanzas de calificar tras haber pasado por encima del bisoño conjunto islandés (2-0).
En el Grupo E, Brasil solo tuvo algún problema con Suiza, con la que empató a dos goles, pero luego superó sin dificultades a Costa Rica y Serbia, en ambos casos por 2-1. Los helvéticos también llegaron a cuartos tras vencer 2-1 a los serbios e igualar a dos tantos contra los ticos, que fueron últimos, pues también habían caído 1-0 con los balcánicos.
Suecia y México calificaron en el Grupo F, mientras en el G Bélgica avasallaba a todos sus rivales para sumar nueve puntos: 3-0 a Panamá, 5-2 a Túnez y 1-0 a Inglaterra. Los británicos se impusieron asimismo 2-1 a los tunecinos y golearon 6-1 a los canaleros para llevarse el segundo boleto. En el choque restante, los africanos vencieron 2-1 a los centroamericanos.
Finalmente, el Grupo H fue ganado por Colombia, que se recuperó de una derrota inicial ante Japón por 2-1 para golear a Polonia 3-0 y vencer 1-0 a Senegal. Los nipones también ganaron 1-0 a los africanos y así avanzaron a cuartos, pese a caer en su último encuentro con los polacos (2-0), pues estos habían iniciado perdiendo 2-1 contra los senegaleses.
Francia muestra sus cartas
Durante los octavos de final aumentó el fragor de las batallas futboleras y los aspirantes al título comenzaron a afinar sus armas. Uruguay logró derrotar a Portugal 2-1 en Sochi, junto al Mar Negro y ante la vista de las montañas del Cáucaso. Mientras tanto, en Kazán, Francia y Argentina libraron el que fue posiblemente el mejor partido del torneo, que finalmente se decantó a favor de los galos por 4-3 y donde Benjamín Pavard hizo un magnífico gol de volea desde fuera del área, que fue considerado, posteriormente, el mejor del torneo.
En Moscú, Rusia y España empataron a un tanto y tuvieron que dirimir el pase en pénaltis, en los que el cuadro de casa fue más certero que el hispano, mismo que había sustituido al técnico Julen Lopetegui por Fernando Hierro apenas una semana antes del comienzo del Mundial. Asimismo, en Nizhni Novgorod, Croacia y Dinamarca debieron recurrir a la última instancia para definir un ganador, serie en la que los croatas fueron mejores.
En la Rostov Arena, Bélgica pasó apuros y se vio en desventaja de dos goles, pero finalmente logró imponerse al veloz conjunto japonés por 3-2, y en el estadio Krestovski de San Petersburgo, Suecia venció por la mínima diferencia a Suiza. Por último, en el Otkrytie Arena de Moscú Colombia logró un empate a un gol en el minuto 93, para llevar a Inglaterra primero a tiempos extras y luego a pénaltis, donde los británicos ganaron.
Otro campeonato europeo
A cuartos de final solamente llegaron dos equipos de Sudamérica y seis europeos, pero tanto Uruguay como Brasil quedarían fuera de combate, los charrúas al caer 2-0 en fragorosa batalla contra Francia y los amazónicos tras ser vencidos 2-1 por los sorprendentes belgas, guiados por su mariscal Eden Hazard, protegidos por el eficaz portero Courtois y apuntalados por la fortaleza de Romelu Lukaku y la habilidad de Kevin De Bruyne.
En los otros dos encuentros, Inglaterra salió avante frente a Suecia por 2-0 en la ciudad de Samara, con lo que los británicos volvían a estar entre los cuatro primeros puestos luego del Mundial de 1990. En tanto, en Sochi, Croacia tuvo que recurrir otra vez a los pénaltis para dejar fuera al cuadro local, Rusia, luego de que habían empatado a dos anotaciones.
Las semifinales fueron duelos muy disputados. La primera de ellas, en San Petersburgo, favoreció a los franceses por 1-0, frente a un Bélgica que nunca dobló las manos y peleó hasta el final, sin que pudiera vencer la meta de Hugo Lloris. En el otro partido, celebrado en Moscú, Croacia e Inglaterra se fueron a prórroga tras haber empatado un tanto en tiempo regular. Al minuto 109, Mandzukic anotó el gol que llevó a su equipo a la final.
El encuentro por el tercer lugar se definió 2-0 a favor de Bélgica, que inició así un paso ascendente que lo llevaría a ser considerado, hasta la fecha, como el segundo mejor equipo del ranking FIFA, solo debajo de Brasil, y lo coloca entre los favoritos para Qatar 2022.
La gran final, celebrada en el estadio moscovita de Luzhnikí, vio el primer autogol en esta instancia en la historia de los mundiales, a cargo de Mandzukic. Pese a ese infortunio, al minuto 28, Ivan Perišić empató, pero 10 minutos un balón le pegó a él mismo en las manos dentro de su área y el VAR decidió que era pénalti, hecho efectivo por Antoine Griezmann.
En el segundo lapso, Croacia presionó, pero Paul Pogba puso el 3-1 en la pizarra y poco después Kylian Mbappé hizo el cuarto. Mandžukić marcó el segundo croata, luego de un error de Lloris, y el marcador ya no se movió. El conjunto galo, dirigido por Laurent Blanc, sumaba su segunda Copa del Mundo en el transcurso de dos décadas.
El inglés Harry Kane, con seis tantos, fue el goleador de torneo, pero el trofeo al mejor jugador se asignó al croata Luka Modric.
Benjamín Segoviano
Profesor de carrera, periodista de oficio y vagabundo irredento. Amante de la noche, la música, los libros, el futbol, la cerveza y el cine. Inclinado a escribir acerca de mi ciudad, mi país y su gente, con feliz disposición a la plática entre amigos y a los viajes por el territorio nacional, en un perenne intento de reflejar en escritos esas experiencias.